Esta es la historia de mi viaje a un Rajastán diferente, donde los leopardos conviven en armonía con pastores y donde imponentes tigres de Bengala emergen majestuosos tras los muros de fuertes milenarios.
La impresionante imagen de una tigresa desperezándose tras los muros de una antigua fortaleza, en Ranthambore National Park ha sido, sin duda, una de las más potentes de mi último viaje.
En el estado indio del Rajastán, conocido por sus majestuosos palacios, impresionantes fuertes y ciudades imperiales, existen también lugares más remotos donde cultura, historia y vida salvaje se mezclan, en un entorno natural de gran belleza.
Para describir lo primero que sentí al adentrarme en Jawai, "la tierra del leopardo", me permito compartir una de las vivencias de Jaisal Singh, fundador, junto a su esposa Anjali Singh, de The Sujan Life, la marca india de alojamientos boutique que pone un foco especial en la conservación de la cultura y vida salvaje del territorio en el que se encuentran.
Jaisal explica que uno de sus encuentros con leopardos más reveladores fue una tarde al caer el sol, en la región de Jawai.
Un leopardo cómodamente recostado sobre una roca elevada, observaba en la distancia los cánticos y celebraciones de un pequeño pueblo cercano.
Y es que una de las cosas que más me han sorprendido de esta región, es la armoniosa y equilibrada convivencia entre el hombre y la vida salvaje.
India en estado puro.
Jawai es una área de gran belleza, mezcla de paisaje desértico e impresionantes formaciones rocosas, rica en patrimonio cultural, situada en el sudoeste del Rajastán.
Allí, entre fascinantes y milenarias rocas de granito, salpicadas de pequeños templos, lagos y campos de trigo, se encuentra SUJAN Jawai, un alojamiento excepcional, con suntuosas tiendas que impresionan al llegar, por su diseño de última generación, en rojos y negros, amplias habitaciones, baños elegantes y terrazas privadas con vistas panorámicas al desierto de Jawai.
Especialmente recomendable la Royal Panthera Suite, que tuvimos la suerte de disfrutar, con piscina privada climatizada durante todo el año, todo un lujo, especialmente en los meses más calurosos.
Al llegar a lo que parecía un territorio inhóspito, en medio de la nada, nos encontramos con la primera de las sorpresas. Junto al guía y chófer que nos acompañarían durante toda la estancia, se encontraba un personaje con una presencia extraordinaria, ataviado con lo que parecía el traje tradicional de alguna tribu, coronado con un espectacular turbante rojo. Era un miembro de la tribu de los Rabari.
Originaria de la antigua Persia, la tribu de los Rabari, convive en armonía con los leopardos presentes en esta región. Salen con sus rebaños al despuntar el día y regresan a su comunidad al ponerse el sol.
Cuando pierden a uno de sus animales porque ha sido presa de un leopardo, lo consideran una ofrenda y parte de su convivencia.
Visitar su comunidad, compartir conversaciones con sus sacerdotes y risas con algunos de los miembros de la comunidad, es una de las experiencias imprescindibles en este lugar.
El viaje gastronómico en Sujan Jawai es espectacular. Realmente impresionante todo lo que el chef y su equipo son capaces de hacer en un lugar tan remoto, con aparentemente pocos recursos cercanos. Huerto propio, granja, hierbas aromáticas, todo lo saben utilizar a la perfección para que el disfrute culinario sea excelente.
Una de las singularidades de observar la vida salvaje en un lugar como Ranthambore National Park, es que aquí, además de la belleza natural y paisajística, los animales se mueven entre espectaculares templos, murallas de antiguos fuertes y palacios bien conservados. El componente cultural e histórico, unido a la impresionante presencia de tigres de Bengala, multitud de antílopes, cientos de pájaros, osos y otras especies, hace de este un lugar totalmente único.
Una de las claves para disfrutar al máximo de esta visita es estar alojado en el lugar adecuado y contar con el mejor de los guías y chóferes.
SUJAN Sher Bagh es el lugar perfecto para ello. Gracias al conocimiento experto del territorio por parte de sus propietarios, que visitaron desde muy pequeños este parque, y del equipo que les acompaña en SUJAN Sher Bagh, la experiencia del viaje y conocimiento de los tigres es perfecta.
Además, estar alojados en las maravillosas tiendas de este campamento, es toda una delicia.
Con un estilo muy diferente al de su propiedad en Jawai, aquí los colores suaves, la madera, el cobre, nos transportan a la época de los primeros safaris clásicos.
La colección de fotografías de Jaisal Singh y su esposa Anjali, ya merecen una visita por sí mismas.
Ranthambore National Park es un parque muy querido y apreciado por los viajeros indios y, por lo tanto, muy popular. Por eso, es imprescindible contar con el mejor de los guías y los mejores vehículos posibles. SUJAN Sher Bagh lo hace posible. No es un detalle menor, hemos visto a otros viajeros esperar y esperar para poder contemplar a los majestuosos tigres, mientras que en una sola mañana, la pericia de nuestro guía y su chófer, consiguió que observáramos numerosos de ellos, en múltiples y diferentes situaciones.En las suites, todos los detalles están cuidados al máximo, desde productos ayurvédicos en el baño, con aceites esenciales para prevenir picaduras de mosquitos, hasta unas camas donde se descansa de maravilla o el excelente y eficaz servicio de lavandería. Fuera de ellas, su deliciosa gastronomía, los diferentes enclaves para disfrutar de una cena mágica bajo las estrellas, el servicio impecable, la amabilidad del personal. ¡Es un imprescindible!
A partir de lo que fuera una fortaleza del siglo XIV, de la que se conserva una gran parte que alberga el maravilloso Spa, Six Senses Fort Barwara ha creado un santuario de bienestar y disfrute en pleno Rajastán.
Ha sido restaurado cuidadosamente, ampliado siguiendo las bases arquitectónicas del edificio original y convertido en un alojamiento espectacular, con unas espaciosas y elegantes suites, que han sabido conservar el legado y el sabor histórico del lugar.
Sus preciosos jardines y espectacular piscina, posiblemente la más grande de todo el Rajastán, lo convierten en un destino en sí mismo, en el que poder disfrutar de unos días relajados, como pausa en un viaje al Rajastán.
Six Senses Fort Barwara ha puesto especial atención en ofrecer al viajero la mejor de las experiencias gastronómicas. No solo en el apartado de comida india, sino de otros continentes. Y lo ha conseguido con éxito. Su cocina y el equipo que la dirige son excelentes.
Al regresar de la India me han preguntado, ¿qué es lo que más te ha gustado? La respuesta parece difícil en un país con tanta diversidad y rico en tantos aspectos, pero además de lo impactante de los leopardos y tigres, lo que sin duda me ha enamorado, es la India rural. Ajena en gran medida a todos los cambios que vive el país hoy en día, en la India rural puedes ver a sus gentes cultivando sus campos, a los niños caminando alegres y divertidos hacia la escuela, a los ancianos conversando a la sombra... Un ritmo mucho más pausado, colores diferentes, gestos auténticos y genuinos de interés por un viajero al que no están acostumbrados. Realmente interesante.
Amanbagh se encuentra idealmente ubicado para disfrutar de todo este entorno. Arropado por las milenarias montañas Aravalli, es el oasis perfecto para finalizar un programa en Rajastán. Elegante y discreto, este alojamiento ofrece una experiencia con toda la calidad y servicio característicos de AMAN, con un equipo de profesionales muy bien formados y con un interés extraordinario por dar a conocer su patrimonio cultural y natural.
Nuestra estancia con ellos reservaba una original y muy divertida sorpresa, ¡un campeonato de Camel Polo! Como el propio nombre indica, se trata de jugar al polo a lomos de un camello.
Créanme, para aquellos que no lo hayan probado, ¡las risas y la diversión están aseguradas!
La parada en Delhi, al inicio o final de un viaje al Rajastán, es normalmente ineludible, por lo que además de visitar los imprescindibles de esta impactante ciudad donde conviven casi 19 millones de personas, merece la pena escaparse de los circuitos habituales y explorar esa Delhi menos conocida.
Tenía especial interés en conocer Lodhi Colony Street y en concreto, "Lodhi Colony Street Art". Se trata de un conjunto de edificios y arquitectura icónica de la última época británica en la India, que tomó un nuevo protagonismo a partir del 2015. Fue entonces cuando un grupo de artistas renombrados de todo el mundo y también de la India, fueron invitados por la St+Art India Foundation para que reflejaran su arte, reivindicaciones, denuncias e historias diversas, en las fachadas de algunos de estos edificios históricos.
Un viaje a la India que me ha encantado, por lo espectacular de la mezcla entre vida salvaje, historia y cultura local. Queda mucho todavía por descubrir allí, ¡así que ya estamos preparando el siguiente!